Por fin tengo otro momentito libre para sentarme a escribir.
Estamos en navidad, la casa huele a hallacas, pan de jamón, pernil y mucho polvo por el montón de adornitos navideños que tenemos guardados en el closet. También estamos en época de pensar “¿Qué coño voy a regalar?”.
No falta en cualquier grupo el juego más famoso de todos, “El amigo secreto”, que a la final no es secreto nada, uno siempre dice quien le toca. Cuando uno estaba más chamo solía encasquetar esa responsabilidad a los paes de comprar el regalito y uno como que no era tan exigente con lo que recibía... hasta aquí vamos bien.
En bachillerato como que la cosa cambia un poco. Cuando era el bendito juego uno dejaba una caja en el salón y en la mañana o en el recreo entrabas “secretamente” y dejabas tu regalo. Si un compañero (a) te caía mal pues tenías tres opciones, o cambiabas el papelito con otro pana o le regalabas cosas chimbas y finalmente.... no le dabas un coño, pero pasabas pena el día del regalo final.
¿En la universidad hicieron amigo secreto? yo no. No soy de andar en un grupo tanto tiempo. Sin embargo aquí es donde empieza mi cuento. Se supone que el regalar algo por una “amistad” no debería tener precio, es decir, en teoría lo que importa es el detalle del regalo, peeeeeeeeeero, como uno es inconforme, entonces para lo siguiente:
El regalo que recibí es más barato que el que yo di
Ya tengo uno de estos
Ah que bien... algún día lo leeré
Coooooño que biennnnnn, necesitaba uno de estos
Esta última es la más extraña de todas, casi no se da a menos que tu amigo secreto sepa exactamente lo que necesitas o que tú le hayas dicho lo que quieres.
Actualmente el juego va así: se pide una cantidad mínima de dinero para entrar (a mi me pidieron 100 mil en la oficina), aparte de ello mucha gente deja escrito en un papel lo que le gustaría recibir de regalo “Me gustaría que me den el libro de Claudio Nazoa – Mi vida como monja” ... hay otros que se ponen más exquisitos y piden perfumes y quien sabe cuantas cosas más.
Lo que me causa gracia de esto es ver la cara de la gente, ver como por fuera dicen “ay que lindo muchas gracias” y por dentro “Yo di un regalo más caro ¿por qué coño me dan algo tan chimbo?” Jejejejeje, yo he puesto esa cara. Sé que suena a mucho interés, pero... ni modo, la mayoría del ser humano es así de materialista.
Para finalizar mi corto post, les cuento que este año pienso regalarle un vibrador con extra potencia a la loca fastidiosa que pretende eliminar mi blog, a ver si con eso tiene un poco más de vida y deja su fijación conmigo.
Estamos en navidad, la casa huele a hallacas, pan de jamón, pernil y mucho polvo por el montón de adornitos navideños que tenemos guardados en el closet. También estamos en época de pensar “¿Qué coño voy a regalar?”.
No falta en cualquier grupo el juego más famoso de todos, “El amigo secreto”, que a la final no es secreto nada, uno siempre dice quien le toca. Cuando uno estaba más chamo solía encasquetar esa responsabilidad a los paes de comprar el regalito y uno como que no era tan exigente con lo que recibía... hasta aquí vamos bien.
En bachillerato como que la cosa cambia un poco. Cuando era el bendito juego uno dejaba una caja en el salón y en la mañana o en el recreo entrabas “secretamente” y dejabas tu regalo. Si un compañero (a) te caía mal pues tenías tres opciones, o cambiabas el papelito con otro pana o le regalabas cosas chimbas y finalmente.... no le dabas un coño, pero pasabas pena el día del regalo final.
¿En la universidad hicieron amigo secreto? yo no. No soy de andar en un grupo tanto tiempo. Sin embargo aquí es donde empieza mi cuento. Se supone que el regalar algo por una “amistad” no debería tener precio, es decir, en teoría lo que importa es el detalle del regalo, peeeeeeeeeero, como uno es inconforme, entonces para lo siguiente:
Esta última es la más extraña de todas, casi no se da a menos que tu amigo secreto sepa exactamente lo que necesitas o que tú le hayas dicho lo que quieres.
Actualmente el juego va así: se pide una cantidad mínima de dinero para entrar (a mi me pidieron 100 mil en la oficina), aparte de ello mucha gente deja escrito en un papel lo que le gustaría recibir de regalo “Me gustaría que me den el libro de Claudio Nazoa – Mi vida como monja” ... hay otros que se ponen más exquisitos y piden perfumes y quien sabe cuantas cosas más.
Lo que me causa gracia de esto es ver la cara de la gente, ver como por fuera dicen “ay que lindo muchas gracias” y por dentro “Yo di un regalo más caro ¿por qué coño me dan algo tan chimbo?” Jejejejeje, yo he puesto esa cara. Sé que suena a mucho interés, pero... ni modo, la mayoría del ser humano es así de materialista.
Para finalizar mi corto post, les cuento que este año pienso regalarle un vibrador con extra potencia a la loca fastidiosa que pretende eliminar mi blog, a ver si con eso tiene un poco más de vida y deja su fijación conmigo.
6 comentarios:
jajaja! este post es veridico... siempre sucede lo mismo con el amigo secreto, yo siempre trato de jugarlo entre familia y asi tengo mas posibilidades de que me regalen algo acorde a mis gustos. saludos!
Jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaajajajajajajajaa!!!!!!!!! Lo siento pero el final del post me pareció demasiaaaaaaaaaaado bueno jajajajajajajajajajaja!!!!
Por lo general me va bien en los juegos de amigo secreto, en especial porque de pana no le paro mucho al regalo como tal sino al compartir y a la echadera de vaina.
El que nunca olvido fue el que hice en 5º grado jejejeje hice correr a mi mamá por toda la ciudad buscando un regalo fantabuloso para mi compañerita, pero la que me regalaba a mi no pensó igual, y me regaló dos angelitos de fieltro para el arbolito de navidad... Que de paso, ni arbolito teníamos en mi casa para ese entonces... Así que FRITA QUEDÉ!!!! x_X jejejejejeje
Jajajaja yo definitivamente espero que con ese regalo (ya no tan secreto jejeje) esa loca se distraiga y se olvide de ti...
Y en cuanto a lo del amigo secreto, pues a mi siempre me regalaban algo peor o_O, pero el colmo fue en la escuela donde una niña me regaló UN...
AZABACHE...
O sea... A quién se le ocurre regalar un azabache???? ¬_¬
"Saludos Monocromáticos"
lol el regalo pa tu fan ajajajajaj ño e la mae
Ja,ja,ja
Tienes toda la razon...
Lo peor que me han regalado en uno de esos intercambios es un "espejo", si un espejo... o sea nada que ver...
En todos los demas "amigo secreto" en que he participado me a ido bien...
jajajaja
Yo que estoy en bachillerato, soluciono eso con los matapartidas: si es chama un peluche y tarjeta...si es un carajo, la plata :)
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